Vosotros la conocíais, pero yo no. Hoy he encontrado una conferencia de Paul Ricoeur con el título “Amor y justicia”. Nada menos.
Este blog podría haberse llamado “A favor de la justicia como valor supremo en las relaciones interpersonales”, pero habría sido poco intuitivo. Y feo. “Contra el amor”, por el contrario, lo concreta todo. Es negativo, y eso puede ahuyentar al lector sentimental. Pero deja el problema tan centrado, tan acorralado, tan en foco que, a pesar de su ostentosa grosería, es sutil. A mí me resulta irresistible.
No me extenderé, pero baste para un sábado decir que el amor legitima los actos en su nombre mediante una moral emocional pues, aunque no es exactamente una emoción, de emoción se ha sacado la licencia. Consecuencia: la bondad o maldad se determina “a sentimiento”. La justicia, sin embargo… en fin, ¡no os voy a presentar ahora a la justicia!
El resto se deduce por sí sólo. Y si no, aquí estamos, para lo que haga falta.
Esto es lo que digo yo. Lo que dice la conferencia… ni idea. Aún no la he leído. Veremos. Pero vaya de antemano que, a estas alturas, ni de Ricoeur me fío.
No hay comentarios:
Publicar un comentario